No hay más miedo que cuando ya no sientes nada.

Dice una canción que no hay más miedo que cuando ya no sientes nada. Quizá ese sea su miedo, el miedo a estar vacía, a ser incapaz de sentir. Pero entonces ella se dice a si misma que siete cariño, odio, dolor, alegría, nostalgia, tristeza, miedo...pero, ¿qué hay del amor? Ha olvidado el significado de esa palabra, y, lo que es peor, ha olvidado lo que es sentirla.

De repente llega a destinos que no imaginaba, a paradas que no pensaba hacer, paradas que creía perdidas.

A su alrededor solo escucha que estar con alguien que es tu todo, es la vida, pero ese alguien no se muestra, está escondido y no quiere mostrarse. Ella cree que la felicidad está de su parte, pero, ¿está equivocada? Se lo pregunta, una y otra vez, y la vida es tan puta que no le responde. Solo la lleva, a la deriva, hacia no sabe donde. Sin embargo ella lo único que quiere es vivir, eso es lo importante, VIVIR, y no tener que sobrevivir en un mundo en el que todo es blanco o negro mientras ella vive su vida en gris.

Eligió gris porque no sabía donde ir. No encontraba a nadie, andaba sola, perdida en esta cosa que todos llamamos vida pero ninguno sabemos qué es en realidad. Sólo sabemos que juega con nosotros y es más lista. Nos da pistas pero no la solución, nos da la indicación pero no el camino. Nos creemos fuertes ante ella y tratamos de encontrarlo, una vez mas volvemos a perdernos y a no encontrarnos. Caemos y nos levantamos, ¿hacemos bien? Como tontos volvemos a pensar que en esto consigue nuestra amiga, la vida, en caer, levantar, luchar, perder, ganar, ¿y ahora qué toca? Olvidar, buscar. Buscar eso que dicen que todos tenemos, sentimientos, amor, alguien que nos quiera como de verdad somos. Cierto que todos dicen que sin ello no se puede vivir, ¿y si no lo encontramos? ¿y si no tenemos la suerte de ser perfectos para alguien? No pasa nada, no somos únicos, hay miles como nosotros, tontos, esperando una respuesta, dejando que jueguen con ellos hasta que se cansen y cuando ya no puedan más le darán la solución exacta para resolver cada misterio, cada prueba, para saltar cada obstáculo de este mundo que llamamos vida.

Mientras tanto, ella seguirá sintiendo todo lo que nadie siente por ella. Amará la vida ante todo, vivirá y será feliz. Al fin y al cabo, no le queda otra. Esto es una juego, probablemente de azar y le toca esperar.

P.C